Hay bodas y Bodas, y la de hoy es una de esas Bodas con mayúscula, de las especiales, de las emocionantes, de las que no dejan a nadie indiferente, da igual que no hayas sido invitado, sólo con ver las imágenes la disfrutas casi tanto como si hubieras estado allí. Joanie y Ryan se casaron en Cozumel (México), un oasis de tranquilidad con vistas impresionantes al mar y naturaleza en vivo. La ceremonia y la recepción se celebraron en un hermoso Resort con kilómetros de playas espectaculares, a corta distancia del centro de la ciudad, por lo que utilizaron ambas localizaciones para su reportaje previo y posterior al enlace. En esta ocasión no voy a destacar nada material porque lo que verdaderamente ha llamado mi atención es la pasión que reflejan los novios en todas las instantáneas, una complicidad absoluta, un amor incondicional, puro y sin reservas. Creo que coincidiréis conmigo cuando digo que los buenos fotógrafos tienen esa sensibilidad especial que hace que uno mismo, cuando ve las imágenes, pueda sentir esas emociones. Me gusta especialmente el final del reportaje, cuando los novios, emborrachados de sensaciones, se retiran a su habitación para prolongar un poco más si cabe esa noche inolvidable para ellos. Un momento que rara vez capta el fotógrafo pero que es la guinda a la felicidad de un día perfecto, ¿no creéis?.

Fotografía: Erin Hearts Court

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