Hace apenas unos días me topé con la que se ha convertido en mi nueva y dulce obsesión, las deliciosas creaciones de Raymond Tan, más conocido como Ray Ray. Un panadero autodidacta de Melbourne que empezó a cocinar como hobby hace tres años mientras estudiaba con poco interés Contabilidad. Por aquel entonces decidió que llevaría los postres cada vez que fuera invitado a comer por sus amigos o conocidos. Como nadie dijo que fuera fácil, durante su proceso de aprendizaje decidió aprovechar los restos sobrantes de todos los pasteles que no habían llegado a buen puerto o a materializarse tal y como él quería y así fue cómo surgió la