Desde que pusimos en marcha el blog, hace ya varios meses, muchas parejas amigas que llevan varios años casadas no paran de comentarme que volverían a pasar por el altar sólo por el placer de disfrutar de una boda diferente y, sobre todo, por poder hacerse unas fotografías como las que suelo publicar en los post de los viernes. Así que desde que descubrí las sesiones ‘trash the dress’ no paro de recomendarles que recuperen sus vestidos de novios y se den el gustazo de regalarse una de ellas. Eso es exactamente lo que hicieron Marisa y Dani, que se casaron hace un par de años en Murcia pero no