Hace unos meses empezábamos el año hablando de las bodas orgánicas, bodas donde lo natural se imponía en celebraciones al aire libre rodeadas de espectaculares paisajes de montañas, playas o bosques. Un tipo de boda que refleja una tendencia en alza y una apuesta por la vida sana, fresca y auténtica. Un amor por la naturaleza que no sólo invade la decoración o el espacio, sino que predomina también en cualquier detalle de la boda, como puede ser el ramo de la novia. Los ramos vegetales también son tendencia y, en su afán por tener una boda lo más natural posible muchas novias deciden dejar de lado las flores para