La sesión de hoy tiene lugar en una de las quintas más bonitas de Portugal, la quinta de Santo Antonio, situada en el corazón del Alto Alentejo, entre Elvas y Badajoz. Un oasis integrado en el monte Amoreira rodeado de naturaleza en estado puro. Su edificio principal representa la mejor arquitectura de las antiguas Fincas, conjugando la armonía de los jardines del siglo XVIII con el envolvente entorno Alentejano. Toda la sesión se desarrolla en el interior de la finca, en un ambiente íntimo y acogedor, por lo que la estética debía responder a la naturalidad y elegancia del entorno. El estilismo de la novia, que luce un discreto diseño