Esta semana se ha empezado a notar ya la bajada de temperaturas en mi ciudad, hasta ahora parecía que el otoño se resistía a aparecer pero desde hace un par de días el ambiente ha refrescado y en pocos minutos el suelo se ha cubierto de hojas secas. En parte, y aunque ya sabéis que me encanta el verano, me apetecía vivir de nuevo bajo los colores cambiantes del otoño, sentir el olor a hierba mojada, chapotear en los charcos y recuperar los paseos por el campo buscando piñas y eucalipto para decorar la casa. El otoño también es una época maravillosa para casarse, siempre os lo digo, y hoy