Ya sabéis que me encantan las bodas de invierno, bueno, en realidad, me encantan las bodas en cualquier época del año pero el invierno tiene ese punto de confort y de calidez que no lo da el verano. Por eso las bodas en invierno dan esa sensación de abrigo y acogimiento que tanto me gusta. Hoy os traigo una sesión que me ha gustado especialmente porque me ha hecho sentir esa sensación de la que os hablo y además porque tiene lugar en una ubicación que normalmente relacionamos con el verano, se trata de la ciudad de Mallorca que muy probablemente muchos de los que me leéis no hayáis pensado