Hoy toca visitar la casa de tu madre o de tu abuela o de esa tía soltera que siempre tiene el piso impecable decorado con reliquias de un pasado mejor y remover cómodas, cajones, armarios y baúles porque en el post de hoy os propongo un tutorial de lo más sencillo: hacer un camino de mesa de crochet o de ganchillo (que viene a ser lo mismo). Si sois de las afortunadas que tienen esos tesoros en la familia pues genial y, si no es así, no os preocupéis porque podéis encontrar tapetes de ganchillo en tiendas de antigüedades, de artesanía local o en mercerías especializadas. Quedarán ideales en bodas de estilo rústico y vintage, aunque también podéis incorporarlos en bodas de aire más minimal ya que la decoración actual permite la combinación de diferentes estilos y épocas. Simplemente vais a necesitar: tapetes de ganchillo de diferentes tamaños, aguja e hilo.

Pasos a seguir:

1. Colocar los tapetes más grandes en fila dejando un espacio entre cada uno de ellos.

2. Distribuir los tapetes de tamaño mediano y pequeño en los huecos libres que han quedado entre los tapetes de mayor tamaño.

3. Coser los bordes de cada tapete formando una línea recta.

Y ya está! Súper sencillo y súper bonito, ya que en pocos minutos tendréis un tapete ideal para colocar sobre la mesa nupcial o sobre todas las mesas de vuestra boda. Si lo preferís podéis destinarlo a la decoración de un único espacio, como la candy bar o la mesa de firmas e incluso podéis animaros a hacerlo más grande de manera que quede tipo mantel y pueda cubrir toda la superficie de la mesa. Ya sabéis, imaginación al poder!

Fotografía: Natalie Franke y Krista A. Jones