Clare y Paul son dos artistas enamorados que quisieron que su boda reflejase su personalidad y su interés por el arte y la música. La novia suele colaborar como artista en la comunidad donde residen y quiso, desde el principio, hacer de forma artesanal todo lo que pudiera para su boda. Y Paul, por supuesto, la acompañó. No os voy a hablar de todo lo que llegaron a producir pero sí de algo que llamó mi atención de inmediato: sus originales centros de mesa. Para su realización utilizaron recortes de papel de libros antiguos mediante los que representaron pequeñas escenas de su vida en común situadas sobre el soporte de otro libro, a modo de escena teatral. Del interior de cada uno de ellos salía un soporte, también de papel, con el número de mesa. La verdad es que el resultado fue una auténtica maravilla y una pequeña obra de arte que dejó boquiabiertos a todos los invitados. Es increíble lo que puede llegar a hacerse con unos pequeños pedazos de papel y una alta dosis de creatividad. ¿Os animáis?

Fotografía: Brigid Dolby Videography