Los novios de la boda de hoy, Brittany y Dave, son unos novios tan cibernéticos que crearon su propio sitio web, con grupo de facebook incluido, para que todos sus invitados no se perdieran ningún detalle del evento. Fue tal el éxito que, basándose en su propia experiencia, han creado una web donde cualquier pareja de novios puede hacer lo mismo que hicieron ellos, ¿no os parece genial? Brittany además es una de esas novias manitas que creó prácticamente toda la decoración de su boda. También confeccionó todos los ramos de flores hechos con madera de cedro y envueltos en tela a juego con la decoración. Y, como no podía ser de otra manera en una boda de marcado carácter 2.0, el motivo principal de la decoración fue el ‘píxel’. Todos los detalles son divertidísimos ya que repiten este elemento en cualquier detalle y situación. Una de las cosas que más le gustan a Brittany son los farolillos de papel de colores y, en este caso, los eligió de formas cuadradas para hacer un guiño a la decoración ‘pixelada’ (si te gustan, los puedes encontrar en nuestra tienda on-line). Toda la cartelería y las invitaciones de la boda reprodujeron el motivo ‘píxel’, que también estuvo presente en las guirnaldas que decoraban el techo, en los centros de mesa, el sitting de invitados y hasta en los muñequitos que coronaban un pastel de bodas muy ‘especial’. Y en lugar de un libro de visitas, Brittany y Dave construyeron un córner que denominaron ‘Guest Blog’, donde los invitados podían dejar sus comentarios, saludos y consejos a los novios a través de su blog. Uno de los momentos más divertidos fue durante la llegada de los invitados, ya que empezaron a bailar con los sombreros de cowboy que los novios les iban entregando a medida que llegaban al aperitivo. Aparte de la divertida decoración, hay dos cosas que a mí me han gustado especialmente, la primera el impresionante  vestido de la novia de la diseñadora Monique Lhullier, con cuerpo de pedrería y falda de tul y la segunda el tutú de las damitas de honor con las botitas camperas, ¡estaban monísimas! Y antes de acabar, ¿queréis saber cómo fue el pastel de bodas? Pues en realidad se convirtió en una pirámide de cupcakes que formaba parte de un concurso organizado por los propios novios en el que ganaba el invitado que mejor los decorase, una forma divertida de hacerles participar de principio a fin en la boda. ¡Felicidades a los dos por hacer de su día algo tan especial!

En UBOshop encontrarás gemelos con las iniciales de los novios, como aparecen en este post.

Fotografía: David Stubbs