Los niños probablemente eran hasta hace poco los grandes olvidados en las bodas pero pasito a pasito han ido adquiriendo el protagonismo que merecen y raros son los novios que no tengan prevista una mesa o un rincón especial en su boda para ellos. Son probablemente los protagonistas de las fotos más divertidas y de las anécdotas más entrañables, los niños son vida y espontaneidad, por eso hay que tenerlos muy en cuenta y darles su lugar. En un próximo post os hablaré de cómo animar esos rincones especiales pero hoy me quiero centrar en la decoración de su mesa. Hay dos elementos básicos que no pueden faltar y que serán vuestros mejores aliados a la hora de plantear todo el montaje: lápices de colores y chuches.

La decoración de la mesa infantil os puede dar mucho juego y, nunca mejor dicho, porque eso es algo que no deberá faltar, el juego y la diversión.

Podéis decorarla con salvamanteles o con manteles completos de papel kraft para que puedan pintarlos ellos mismos mientras esperan a que les llegue su plato. El tema de los dibujos y las pinturas siempre triunfa. También podéis colocar pequeños lienzos con acuarelas o caricaturas de los propios novios para que ellos las coloreen. Otra idea muy divertida es colocar cámaras de fotos desechables en sus platos, con un mensaje escrito asignándoles una misión para que hagan de espías o paparazzis en la boda y tomen las mejores fotos a los novios e invitados sin que nadie se dé cuenta. Seguro que después os reiréis muchísimo viendo esas fotos. Podéis también tematizar las mesas y decorarlas en función de la temática elegida, por ejemplo el Circo, Star Wars, Disney, etc. Siguiendo esa misma línea la temática también puede ir en relación a la época del año en la que se vaya a celebrar la boda, por ejemplo si la boda es en invierno podéis decorarla con motivos navideños divertidos como vasitos con forma de reno o bolas de cristal rellenas de chuches y si es en primavera quizás os animéis a montar una mesa baja de estilo boho con palets y almohadones divertidos para que puedan sentarse sobre ellos mientras disfrutan de unos refrescantes zumos de frutas naturales. El sitting también puede dar mucho juego, ya que podéis poner el nombre del niño en figuras de animales o de sus personajes de cómic preferidos o dejarles algún regalito sobre el plato, un cuento, un burbujero o una piruleta XXL, también podéis decorar las servilletas con pulseras comestibles de colores o las sillas con globos de helio. Cualquier idea será bien acogida en el universo infantil, eso dadlo por seguro, así que el mejor consejo que os puedo dar es… imaginación al poder!

Fotografía: Jen Fariello Photography, Brushfire Photography, Pinterest