En moda, los complementos son la clave en la mayoría de ocasiones. Gracias a ellos podemos transformar un vestido en otro completamente distinto o utilizar la misma prenda para ir al trabajo y más tarde acudir a un cóctel. Con cuatro básicos en nuestro armario y un juego idóneo  de complementos nos parecerá que estrenamos ropa cada día y es que un pañuelo, un collar o unos zapatos pueden ser la varita mágica que mude el estilo y diseño de nuestro guardarropa. En bodas sucede lo mismo. Aunque el vestido siga siendo el rey del estilismo de la novia, podemos transformarlo según el momento de la boda simplemente añadiendo un