Con la inminente llegada de la primavera empezamos ya a pensar en bodas y celebraciones al aire libre. No sé si os pasa pero cuando llega esta época a mí lo que realmente me apetece es coger una cesta de mimbre, llenarla de cosas ricas y pasar el día en el campo con la familia o los amigos. Antes, que no había por costumbre salir mucho a restaurantes, los domingos había dos tradiciones inalterables en nuestro país, la paella en casa de los abuelos y la comida en la montaña. Ahora a esto último le llamamos picnic, que siempre queda como más chic, pero la tradición de pasar el día