Hoy os traigo una sesión de inspiración otoñal que incorpora elementos propios de esta época del año pero que huye de los tonos típicos, como son los marrones y anaranjados, con el objetivo de dar al reportaje un toque de sofisticación que se logra centrando toda la decoración en tonalidades blancas y plateadas. La protagonista indiscutible es la calabaza pero en combinación con otros objetos más cálidos como pueden ser las velas, las farolas de vidrio o el follaje propio del otoño. Me ha gustado especialmente el pasillo que enmarca la llegada de la novia, compuesto de calabazas y velas de distintos tamaños y alturas, en color blanco y plateado,