Parece ser que esta temporada el bronce es el nuevo dorado, de hecho este metal tiene esa tonalidad envejecida que imprime en los objetos un aire entre decadente y antiguo que les otorga una personalidad especial. Tras el indiscutible éxito del zinc, ahora es el bronce el que toma el relevo en la decoración de boda, adaptándose a objetos y formatos de lo más variado y estando presente en baldes, recipientes, cake toppers, invitaciones, ramos de novia e incluso en tartas nupciales. Junto al cobre y el latón, protagoniza la decoración de románticos centros de mesa, originales seating de invitados y empieza ya a verse diferentes objetos realizados en este