La hospitalidad sureña y el amor por los amigos, la familia y la naturaleza, protagonizan la boda de Emily y Josh, una pareja que derrocha amor y alegría por donde pasa. Se conocieron siendo unos adolescentes y su amor se mantuvo en el tiempo y la distancia hasta el día en el que lograron por fin estar juntos de nuevo, esta vez para siempre. Los dos son amantes de la vida al aire libre y del ambiente familiar por lo que quizás la anécdota más curiosa fue la elección del lugar de la ceremonia, un día antes de comprometerse la pareja estaba dando una vuelta por Franklin cuando divisaron una